Otro efecto no deseado del covid-19: ¿La caída del cabello?

Podría parecer frívolo dar espacio a este efecto colateral de sufrir un contagio por COVID, pero ahora que vemos que, aunque seguimos inmersos en esta virustiranía, la mortalidad no es tan feroz como en 2020 y es lógico temer por otras consecuencias más allá de la vida.

Si hemos aprendido algo es a esperar lo inesperado. Y ya no nos extraña que, meses después de recuperarse del COVID-19, muchas personas descubren que pierden el cabello de forma preocupante.

Hasta hace poco, los motivos más comunes de la caída del cabello incluían:

  • Los cambios hormonales
  • Problemas de salud subyacentes
  • Deficiencia de vitaminas o nutrientes
  • El consumo de determinados medicamentos

Ahora ya podemos incluir el COVID como uno de los mayores causantes de el más común de los terrores capilar. A quienes está afectando más es a las mujeres que ven cómo su cabello cae de forma descontrolada cada vez que lo lavan o cepillan.

La caída temporal del cabello es normal después de una fiebre o una enfermedad

La explicación no tiene más misterio: la fiebre es un síntoma común de COVID-19 y dos o tres meses después de tener fiebre alta o recuperarse de una enfermedad, muchas personas sufren una pérdida de cabello notable.

El cuerpo es una máquina perfecta. Y cuando se ve sometido a condiciones extremas, dedica sus recursos a funciones que son fisiológicamente más importantes, se concentra en sanarse y repararse a sí mismo, y no en el crecimiento del cabello.

La lectura ante esta caída post contagio, podría ser positiva: el sistema inmune ha trabajado como debía. Pero esto no quita que queramos ayudar a nuestro organismo a regenerar o equilibrar esta pérdida.

El estrés puede provocar la caída temporal del cabello

El estrés emocional también puede forzar más de lo que consideraríamos normal la fase de caída. 

¡Qué levante la mano el que no ha sentido ansiedad desde que comenzó la pandemia! De modo que, a la guerra inmunológica hay que sumarle la caída por estrés que también empieza aproximadamente dos o tres meses después de que empiece el episodio de ansiedad.

 

Normalmente el equilibrio se restaura por sí solo

Cuando la causa de la caída del cabello se debe a fiebre, enfermedad o estrés, el proceso de crecimiento tiende a restablecerse por sí solo. Sólo hay que darle tiempo y una ayuda extra, por ejemplo, con un complejo vitamínico o una loción local ya que, después de sufrir los efectos del virus, el cuerpo agradece cualquier ayuda extra para volver a su equilibrio. En este artículo ya tratamos posibles causas y profundizamos en posibles soluciones.

Los profesionales de la salud y la belleza capilar pueden aconsejar eficazmente con productos coadyuvantes.

Carrito de la compra

0
image/svg+xml

No products in the cart.

Seguir comprando