Los sillones de barbero son una de las mayores inversiones del negocio y sufren un uso intenso durante muchas horas a la semana. Este uso constante requiere un nivel adecuado de mantenimiento para que luzcan en las mejores condiciones durante el mayor tiempo posible. A continuación, te damos 4 ideas básicas para que le saques el máximo rendimiento posible.
Revisiones periódicas
Las comprobaciones regulares pueden evitar grandes males. Si compruebas de forma regular las diferentes partes de tus sillas de salón podrás asegurarte que están funcionando correctamente y que un uso más brusco de lo normal no las dañaría.
Por ejemplo, sería el caso de probar la bomba hidráulica para asegurarte que el sillón puede subir y bajar sin dificultad. Te aconsejamos que, una vez al día, eleves la silla a su máxima altura y la dejes bajar para que se mantenga lubricada y evite cualquier atasco.
Además de revisar las piezas que vienen de serie, puedes mejorar su comodidad y prestaciones con los complementos que tanto facilitan el confort del cliente como el trabajo y la postura corporal del estilista.
Revisa la garantía de tus sillones
Muchas veces, con el día a día del negocio, nos olvidamos de las ventajas que nos dan nuestros distribuidores. Revisa si dispones de garantía de tus proveedores para el mantenimiento de tu material, para poder reponer cualquier pieza que tengas en mal estado de forma gratuita.
Limpieza regular
El tercer consejo para mantener las sillas de la peluquería es la limpieza regular. Cada cliente que acude a una cita de peluquería se sienta en una silla de corte, por lo que es esencial limpiarlas y desinfectarlas entre cliente y cliente. Deberás asegurarte de limpiar cualquier exceso de pelo y residuos de productos para garantizar el bienestar de la clientela pero también para evitar que la tapicería, las bombas hidráulicas o los embellecedores del sillón se dañen.
Bajar las sillas
El cuarto consejo para el mantenimiento de las sillas de tu salón es bajarlas a su máximo. Ajustar constantemente las sillas para los clientes puede suponer un esfuerzo para sus bombas. Por lo tanto, cuando su silla no está en uso, te aconsejamos bajarla siempre a su altura base. Siguiendo esta práctica, el sillón puede descansar de la tensión y el peso que se ejerce sobre él a lo largo del día.
Con nuestros diseños, además de belleza y funcionalidad, buscamos conseguir que los muebles duren el mayor tiempo posibles y en las mejores condiciones, pero un buen mantenimiento, además de un buen uso, son decisivos en la vida de cada mueble.
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